jueves, 26 de junio de 2008

Led Zeppelin, algo más que un cóctel explosivo

Por Paul Citraro
Junto a Black Sabbath y Deep Purple cimentaron la trilogía de rock duro que nunca jamás haya escuchado el mundo a fines de la década del 60. Incluso al inicio de su carrera, Led Zeppelin tenía fuertes marcas no solo de su propio estilo, el heavy metal, sino del rock más influyente hasta ese entonces en Inglaterra. Podían verse las claras influencias de otros estilos, como el folk o el blues norteamericano. Información musical que llegaba de a retazos, solo en países de tradición portuaria.
Entonces, ¿cuál fue el secreto por el que el grupo visitaba libre de peajes las huestes del Olimpo? Básicamente ser un grupo. Y no meramente la suma de sus cuatro integrantes. Hasta el día de hoy, ni por asomo ningún cantante de rhythm & blues le pone siquiera las manos al grito lacerante o el falsete lírico de Robert Plant, en aquellos tiempos. Bueno, hagamos una excepción, mencionemos a Paul Mc Cartney también.
La banda fue un cañonazo victorioso para el rock inglés. Tras adoptar un intimidante estilo de ejecutar los riffs (1) de guitarra a cargo de Jimmy Page -principalmente cuando versiona a You Shook Me, de Willie Dixon-Es el mejor testimonio del disco de que las raíces bluseras subyacen al grupo. Trazaban aristas insólitas que terminaron por delinearse en el rock diez años después. Ante cualquier duda, consultar “Danzed and Confused”, una canción que no solo marcaba la ruta futura, tenía el solo descendente de bajo más impactante de la historia del rock, quizá. Mérito del bajista: John Paul Jones. El último componente de esta bomba de neutrón llamada Led Zeppelin era (el finado) John “Bonzo” Bonham. Un “disciplinado” baterista que convirtió a las canciones de Zepp en algo más grande todavía.
El hito estaba definido aquí en “Led Zeppelin”. Letras caprichosas, con cierta inclinación hacía la ingenuidad -más romántico el mito, todavía-, y dos frontman; un cantante plagado de recursos vocales y variables de entonación. El otro hombre "de frente" es evidente para el ruedo del rock: Jimmy Page, un guitarrista que confeccionó un estilo de ejecución tan ingenioso que fue más allá de las seis cuerdas.
Si bien en discos posteriores los Zeppelin alcanzaron fama devocional, desde cualquier mirada posible ligada al rock, fue en discos posteriores que alcanzaron la madurez. Pero, se sabe, como en un cuadrilátero de box o una riña callejera, quien asesta el mejor golpe posible desde el vamos tiene las de ganar.

(1) Riff es la frase insistente que repite un músico y delinea, de algún modo, su estilo de tocar.

1 comentario:

Bruno dijo...

excelente el blog Paul!
tengo para pasarte el dvd doble de Led, del regreso, en el 2007, en el O2 de Londres.
un abrazo!